El invierno es sinónimo de frío y de mantas calentitas y peludas. Y lo mejor de los acogedores días de invierno es el aporte vestibular y propioceptivo que puede proporcionar una manta acolchada.
Actividad vestibular de invierno para convertir la terapia en juego
Coge unas cuantas mantas resistentes y colócalas en el suelo. Enrolla a tu hijo como un burrito de invierno. Siga enrollando una vez que estén bien envueltos. A continuación, rodarlas en la otra dirección para desenvolver el burrito de invierno. Cambia la entrada vestibular creando un gran rollo con las mantas (¡sin el niño dentro!) Utiliza el rollo de mantas como una barra de equilibrio(como hicimos aquí) o para tumbarse.
Propiocepción Actividad de invierno con mantas
Enrollar a un niño en una manta es una forma estupenda de proporcionar un estímulo profundo a todo su cuerpo. Esto es calmante y organizador. Añade un estímulo propioceptivo para calmar y regular al niño apilando almohadas encima de él después de envolverlo en la manta. Presione uniformemente y con suavidad, pero con firmeza, con ambas manos para ejercer una presión profunda.
Este post forma parte de las actividades de nuestro Calendario de Enero donde estamos compartiendo actividades propioceptivas y vestibulares para cada día.